Infidelidad o cobardía'??
Hace apenas dos semanas una persona cercana me confesó que había sido infiel a su pareja. Una pareja de casi 17 años aparentemente normal, pero con muchos problemas de convivencia. Mis piernas flaquearon por unos minutos, la cabeza comenzó a dolerme… pero sobre todo me afectó al corazón. Éste se agitó de forma precipitada, fui víctima de la nostalgia, ese barrizal donde nos revolvamos los seres humanos a veces con tanta complacencia como lo haría un marrano.
Por supuesto pensé en mí y en mi pasado reciente y reflexioné sobre la cobardía del ser humano. Casi todas, por no decir todas, las parejas que se rompen, lo hacen porque aparece algo novedoso, alguien que quizás te ofrece lo que dentro de la pareja no encuentras, o bien es tan atractivo eso que te prometen, y tan distinto, que deseas probar a ver qué ocurre…esto pasa en el 99% de los casos. No siempre es así, pero en muchas parejas sí que ocurre. Muchas veces son caprichos del destino. ¿Caprichos?, me dirán algunos…¿caprichos que duran años?... bueno, hasta que aparece otra persona y te nubla de nuevo la vida. Todo se acaba de nuevo y al igual que entonces, comienza otra relación y así hasta la muerte, porque son personas insatisfechas emocionalmente y que no son capaces de hallar la ecuación perdida dentro de su hogar.
¿Por qué tiene tanto miedo el ser humano a quedarse solo?, ¿Por qué es capaz de soportar un infierno durante años y no se arriesga a tirar la toalla y romper con todo antes de que la infidelidad se produzca?...Yo no dejo de pensar que es cobardía, temor a romper con todo y pagar las consecuencias…Porque amigos, es más fácil comenzar de nuevo si tienes a alguien ya en el bolsillo, duele menos al menos. COBARDÍA, SÓLO ESO… Y ruindad…y sobre todo demuestra poco apego por la persona con la que se han compartido esos años.
En muchas ocasiones también la infidelidad es preparada por uno de los miembros para salir airoso de la pareja, como una escapatoria cruel y malvada. Sí, y hablo de estrategia, aunque muchas veces sea inconsciente. Estoy segura de que si reflexionásemos mucho antes de que la infidelidad apareciera, sobre las razones de la relación que cada uno está o ha estado viviendo (amor, confianza, estabilidad, sexo…) todavía nos seguirían pareciendo válidas muchas de éstas… ¿Por qué echarlo todo a perder por un affaire pasajero?... aunque en muchos casos me temo que es mejor esa ruptura que estar en convivencia con la apatía más absoluta y letal, y ahora recuerdo por qué estoy tratando este tema y no otro, justo por la noticia sobre la infidelidad vivida por esta persona amiga.
Yo quiero desde aquí ofrecer toda mi comprensión tanto a la persona que ha cometido la infidelidad como a la persona vejada. A la primera, comunicarle que estoy en desacuerdo con su actuación, bastante censurable por lo dicho arriba, aunque también perdonable, yo misma he perdonado una acción similar. Claro está, esta situación se tolera, siempre y cuando las cosas volviesen a recolocarse y no se den nunca más motivos de desconfianza. A la segunda persona le recomiendo que jamás adopte el papel de víctima porque no lo es; que jamás se arrastre, ni llore ante la persona que la abandonó por otra tratando de acercarla, porque lo único que lograría sería alejarla para siempre. Los humanos nos apartamos de los problemas como de un apestado, pero si además ese problema llora y llora a diario porque no puede vivir sin nosotros, la cosa se complica aún más llegando incluso a la desaparición de la persona que abandona, convirtiéndose por arte de no sé qué mágica destreza en un fantasma.
Por supuesto pensé en mí y en mi pasado reciente y reflexioné sobre la cobardía del ser humano. Casi todas, por no decir todas, las parejas que se rompen, lo hacen porque aparece algo novedoso, alguien que quizás te ofrece lo que dentro de la pareja no encuentras, o bien es tan atractivo eso que te prometen, y tan distinto, que deseas probar a ver qué ocurre…esto pasa en el 99% de los casos. No siempre es así, pero en muchas parejas sí que ocurre. Muchas veces son caprichos del destino. ¿Caprichos?, me dirán algunos…¿caprichos que duran años?... bueno, hasta que aparece otra persona y te nubla de nuevo la vida. Todo se acaba de nuevo y al igual que entonces, comienza otra relación y así hasta la muerte, porque son personas insatisfechas emocionalmente y que no son capaces de hallar la ecuación perdida dentro de su hogar.
¿Por qué tiene tanto miedo el ser humano a quedarse solo?, ¿Por qué es capaz de soportar un infierno durante años y no se arriesga a tirar la toalla y romper con todo antes de que la infidelidad se produzca?...Yo no dejo de pensar que es cobardía, temor a romper con todo y pagar las consecuencias…Porque amigos, es más fácil comenzar de nuevo si tienes a alguien ya en el bolsillo, duele menos al menos. COBARDÍA, SÓLO ESO… Y ruindad…y sobre todo demuestra poco apego por la persona con la que se han compartido esos años.
En muchas ocasiones también la infidelidad es preparada por uno de los miembros para salir airoso de la pareja, como una escapatoria cruel y malvada. Sí, y hablo de estrategia, aunque muchas veces sea inconsciente. Estoy segura de que si reflexionásemos mucho antes de que la infidelidad apareciera, sobre las razones de la relación que cada uno está o ha estado viviendo (amor, confianza, estabilidad, sexo…) todavía nos seguirían pareciendo válidas muchas de éstas… ¿Por qué echarlo todo a perder por un affaire pasajero?... aunque en muchos casos me temo que es mejor esa ruptura que estar en convivencia con la apatía más absoluta y letal, y ahora recuerdo por qué estoy tratando este tema y no otro, justo por la noticia sobre la infidelidad vivida por esta persona amiga.
Yo quiero desde aquí ofrecer toda mi comprensión tanto a la persona que ha cometido la infidelidad como a la persona vejada. A la primera, comunicarle que estoy en desacuerdo con su actuación, bastante censurable por lo dicho arriba, aunque también perdonable, yo misma he perdonado una acción similar. Claro está, esta situación se tolera, siempre y cuando las cosas volviesen a recolocarse y no se den nunca más motivos de desconfianza. A la segunda persona le recomiendo que jamás adopte el papel de víctima porque no lo es; que jamás se arrastre, ni llore ante la persona que la abandonó por otra tratando de acercarla, porque lo único que lograría sería alejarla para siempre. Los humanos nos apartamos de los problemas como de un apestado, pero si además ese problema llora y llora a diario porque no puede vivir sin nosotros, la cosa se complica aún más llegando incluso a la desaparición de la persona que abandona, convirtiéndose por arte de no sé qué mágica destreza en un fantasma.
Comentarios
L.T.
D.O
Yo también pienso que es cobardía e incapacidad de enfrentarse a un problema gordo como es una separación...Lo más fácil es dejarlo pasar y buscar otro pajarito del que me ilusionaré y entonces, cogeré fuerzas para largarme antes.
Cobardía y no otra cosa
He dicho.
Lo que pasa que muchos no se arriegan hasta que lo tiene bien atado, es decir, hasta que la otra compañía no esté asegurada no se mueve un dedo. Eso es puro egoísmo, además de ser ruin.
Infidelidad puede ocurrir por hastío en la pareja o porque hay personas que no son capaces de valorar a nadie y siempre quieren más y más y cualquier excusa es válida para comportarse como se comportan. Con ese tipo de personas, ya se puede esforzar uno que todo ese empeño tiene todas las papeletas de caer en saco roto.
Finalmente, tienes razón lo lo de llora y llorar. Todos tenemos un límite y ante los problemas o temas chungos que van acompañados de ese estado continuo de lamento y victimismo nos alejamos para no volver jamás. Esa actitud no sirve de nada.
Primero hay que quererse a sí mismo, más incluso que a la otra persona y luego querer por placer y no por necesidad o miedo a la soledad pues si no luego viene la dependecia, los lamentos...
Esperanza