¿Has dejado de existir para alguien?

A menudo el ser humano conoce el rostro más amargo, la muerte de un ser querido, por ejemplo, y en otras ocasiones nos toca asumir algo más grave que la muerte, al menos en mi opinión, porque para mí la muerte es algo asumido y nada terrible. Me refiero a “dejar de existir para alguien”, es decir, que con la magia de no sé qué conjuro te hagan desaparecer como un conejo en un sombrero… y como es casi repentino, tu cerebro no comprende las razones que han llevado a esta extraña situación. Y yo sé que en el fondo nadie puede desaparecer de la vida de nadie. Si has significado TODO en otra época en la vida de ese mago Merlín, si has compartido risas, llantos, momentos buenos y menos buenos, si has crecido mucho al lado de esa persona… puedo aseguraros que no te evaporas, que SIEMPRE vas a estar en la mente y en la vida de ese afortunado mortal que se encontró contigo, que ahora parece relegarte a un plano diferente, tal vez al ostracismo, al destierro.
Recibir señales de humo al menos te da las pistas justas que te harán sentir que la espera no es en vano; pero si el silencio, la distancia y el tiempo se van dilatando, la certeza de que algo injusto está ocurriendo, reaparece. La desilusión y la creencia de que no existes para esa persona regresan y se te adhieren al pellejo. Y vivir el presente a veces no es la única solución, aunque parezca la mejor manera de soportarlo.
Comentarios
A ver si no hay que tripitir el mensaje.
Iván
Iván
M.T.
C.M.
EVa
EVA
Si, soy Yo....
VC
Pero a veces si esa persona en los últimos momentos de tu vida fue muy cruel contigo y no se portó bien es de entender y respetar que la otra no quiera saber nada más de ella.
No todos los comportamientos son perdonables.
Aunque también es cierto que muchas veces apartamos a los que menos daño nos han hecho y a los que son unos aunténticos... siguen estando. En fin, así somos los humanos